Cierres de plantas industriales provocan más de 400 despidos en 15 días

Cierres de plantas industriales en la segunda quincena de noviembre dejaron más de 400 despidos y críticas por la competencia de importaciones

En la segunda quincena de noviembre de 2025, al menos cinco plantas industriales del país cerraron o suspendieron actividades, con un saldo superior a 400 despidos y una fuerte afectación en cadenas productivas regionales.
Los casos se concentraron en Buenos Aires, La Rioja y San Luis y abarcaron sectores clave como electrodomésticos, metalurgia, textil, calzado y autopartes.
Empresas y sindicatos atribuyen las medidas a la baja del consumo interno y al ingreso de productos importados a menor costo, con impacto directo en el empleo y en proveedores locales.

Cierres y despidos en el polo industrial de Pilar (Buenos Aires)
En el partido de Pilar, la multinacional de electrodomésticos Whirlpool cerró de manera sorpresiva su planta y despidió a 220 trabajadores de producción, ingeniería y calidad.
La empresa indicó que la combinación de menor demanda y mayor presión de importaciones dificultó su competitividad, y adelantó que busca reconvertir su presencia en Argentina hacia una operación más comercial y menos industrial.
En el mismo distrito, la firma de utensilios de cocina Essen despidió a 34 empleados, entre efectivos y eventuales, en áreas de fundición y mecanizado por la caída de la demanda local.
Ambos cierres afectan no solo a las plantillas directas sino también a talleres, proveedores y servicios vinculados en el conurbano bonaerense.

Golpe al textil y al calzado en La Rioja
En La Rioja se destacaron dos paros de actividad en la industria textil y del calzado.
La empresa Luxo suspendió operaciones y comenzó un proceso de desvinculación que alcanzó a 40 trabajadores, en un cuadro marcado por la caída de ventas y la detención de la operatoria que abastecía el mercado interno.
En Sanagasta, Vulcalar detuvo su producción y dejó en una situación crítica a cerca de 80 empleados, interrumpiendo una actividad con peso en el entramado industrial local.
Estos casos muestran la vulnerabilidad de ramas intensivas en mano de obra ante la competencia de importaciones y el deterioro del poder adquisitivo.

Cierre de autopartista en San Luis y efectos multiplicadores
La autopartista Dana comunicó en Naschel el cierre definitivo de su planta, con 50 despidos directos y al menos 40 puestos indirectos afectados en la red de proveedores y servicios.
El cierre agrava la caída en la producción de vehículos y evidencia las dificultades competitivas del sector autopartista ante costos locales y menor demanda.

Reclamo de la UIA por competitividad y condiciones de costos
El presidente de la Unión Industrial Argentina (UIA), Martín Rappallini, señaló públicamente las limitaciones de competitividad que afronta la industria.
Según Rappallini, los costos de producción en Argentina son entre un 25% y 30% superiores a los de Brasil por factores impositivos, laborales y de infraestructura.
Además advirtió sobre la entrada de productos por plataformas globales y desde China, en muchos casos sin el pago de tributos correspondientes, y pidió al Gobierno reducir la carga impositiva y acelerar reformas para equiparar condiciones.

Cierre de Color Living en Pacheco y temor a la sustitución por logística de importados
Color Living anunció el cierre abrupto de la producción en su planta de Pacheco y el despido de toda la dotación operativa, alrededor de 40 empleados de carpintería y costura.
La empresa justificó la medida por la caída de la demanda, el enfriamiento de la economía y la mayor apertura de importaciones, en línea con otras decisiones en las últimas semanas.
Los trabajadores sospechan que la planta podría convertirse en un centro logístico para distribuir productos importados, lo que implicaría una sustitución de producción nacional por mercadería del exterior similar a la situación planteada por Whirlpool.
El Sindicato de Madereros Zona Norte anunció que llevará el reclamo por los despidos y el cierre ante el Ministerio de Trabajo.
La planta principal de Color Living en Villa del Rosario (Córdoba), donde se emplean unos 400 trabajadores, no estaría afectada por el momento.

Impacto regional y cadena de valor
Los cierres y suspensiones no solo reducen empleos formales, sino que también deprimen la actividad de proveedores, servicios logísticos y comercios locales, amplificando el efecto sobre el empleo indirecto.
Empresarios y representantes sindicales advierten que la continuidad de estos factores —baja de consumo interno y competencia de importaciones a menor precio— puede profundizar la desindustrialización en zonas con concentración de pymes y mano de obra intensiva.

Frente a este cuadro, las demandas empresariales se centran en medidas que mejoren la competitividad, mientras los trabajadores y sindicatos buscan medidas de protección y reubicación laboral ante una ola de cierres que, en 15 días, dejó una huella significativa en varias provincias.