Avellaneda: Más de 200 barrabravas de Independiente fueron detenidos

Avellaneda: Más de 200 barrabravas de Independiente fueron detenidos

Avellaneda: más de 200 integrantes de la barra de Independiente fueron detenidos durante un operativo policial antes del partido contra Rosario Central, por intimidación pública y resistencia a la autoridad.

La Policía de la provincia de Buenos Aires detuvo a Pablo “Bebote” Álvarez, a Alejandro “Terremoto” Caiño, a Lucas Gauto y a otros 212 simpatizantes de la facción conocida como “Los Diablos Rojos”.
El procedimiento se realizó en el marco de una causa que investiga la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 1 del Departamento Judicial de Avellaneda-Lanús.
El hecho tuvo lugar en la previa del encuentro por la Liga Profesional de Fútbol entre Independiente y Rosario Central.
El informe policial consigna que Álvarez había anunciado su intención de tomar el control total de las tribunas del club en ese partido.
Según la fuerza, el líder buscaba desafiar a la facción “oficial” encabezada por “Juani” Lenczicki, lo que podía derivar en enfrentamientos dentro del estadio o en sus inmediaciones.
Ante la posibilidad de una batalla entre barras, las autoridades montaron un operativo preventivo para evitar incidentes mayores.
En ese marco fue aprehendido Pablo “Bebote” Álvarez, pese a que registra derecho de admisión en el club.
También se detuvo a dos líderes más de la facción y a 212 integrantes que participaban del despliegue.
Las detenciones se concretaron por los delitos de intimidación pública y resistencia a la autoridad, según informó la Policía bonaerense.
Durante el operativo se secuestró una bandera con la leyenda “Barracas”, que, según la causa, habría sido sustraída a la otra facción.
La hipótesis oficial indica que esa insignia podría haber motivado intentos de recuperación y nuevos choques entre facciones.
Además se incautaron otras 20 banderas, tirantes, telones, bombos y paraguas utilizados por los hinchas organizados.
Con conocimiento del desplazamiento de la facción oficial desde Barracas hacia Avellaneda, se envió una comisión policial al límite con la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
El objetivo de esa medidas fue retener a la facción rival y evitar su ingreso o el cruce de personas durante el operativo.
Fuentes policiales explicaron que la acción buscó neutralizar riesgos y mantener el orden en las inmediaciones del estadio.
La intervención responde a decisiones judiciales y a la necesidad de prevenir confrontaciones violentas entre grupos de hinchas.
Las actuaciones quedaron registradas en la causa que tramita la UFI 1 de Avellaneda-Lanús, que continuará con las medidas pertinentes.
La detención de más de 200 barras de Independiente subraya la grave tensión que existe entre facciones dentro del entorno del club.
El operativo volvió a poner en foco la problemática de la violencia en las tribunas y las estrategias policiales para su contención.
Las autoridades evaluarán las responsabilidades penales y administrativas de los detenidos en el marco de la investigación.
En las próximas horas se esperaba el avance de la causa y la posible imputación formal de los involucrados por parte del Ministerio Público Fiscal.
El accionar policial y judicial tendrá continuidad para intentar desarticular la estructura de las barras y prevenir futuros incidentes en partidos.