Gallardo define el delicado 11 de River para el Súper ante Gimnasia
A 13 días del superclásico, Marcelo Gallardo enfrenta un problema de gestión: tres jugadores de River —Lucas Martínez Quarta, Lautaro Rivero y Marcos Acuña— acumulan cuatro amarillas y, sumado a la amonestación recibida ante Gimnasia, corren riesgo de suspensión para el clásico.
La situación complica la necesidad urgente de reacción del equipo tras la eliminación en la semifinal de la Copa Argentina. River necesita sumar de a tres para no perder terreno en la lucha por un pasaje directo a la Copa Libertadores 2026: actualmente quedó tercero, en zona de repechaje, después del triunfo de Boca ante Barracas. Además, el equipo está quinto en la Zona B y debe mejorar su posición para aumentar las chances de ser local en los octavos del Clausura.
El dilema de Gallardo radica en que se trata de tres defensores clave por su rol y carácter, por lo que una amonestación más alteraría la estructura defensiva del equipo. Entre las alternativas que maneja aparecen Paulo Díaz para la zaga y Milton Casco como opción en el lateral. Si decide preservar a los titulares, Juan Carlos Portillo podría cubrir el fondo; esa posibilidad cobraría fuerza si Enzo Pérez retorna al once inicial.
El DT, que considera que “es un momento para hombres”, probablemente se incline por la experiencia: además del posible regreso del capitán, en el mediocampo podrían actuar Nacho Fernández y Castaño como internos, con Juanfer Quintero como enlace.
Otro interrogante es el reemplazo de Driussi, baja por una lesión muscular sufrida el viernes en el Kempes. Ese puesto podría ocuparse con Cristian Jaime si Gallardo opta por a Salas como único delantero; por su parte, Maxi Meza aparece como candidato fuerte para recuperar un lugar en el sector creativo.
